El Sr. Presidente del Cabildo y las inundaciones: ¡Quita pallá que me tiznas!, dice el sartén a la olla. (En la imagen isomáximas en 24 horas a 10 años, cuencas de recepción de barrancos y ubicación y tipo de bienes afectados)
Si has leído las declaraciones del Sr. Melchior acerca de la actuación del Cabildo en este asuntillo de las inundaciones en el norte de Tenerife, la conducta de esta institución ha sido ejemplar (aunque en un año no haya tenido la ocasión de recordarle a la Consejería de Medio Ambiente del Gobierno de Canarias que el PDA estaba pendiente del dictamen de exclusión de impacto ambiental). Es más - viene a añadir el Sr. Consejero de Aguas, D. Pedro Suárez - el PDA, aunque sin fuerza legal, se ha venido aplicando desde hace ya algunos años con el consenso de los ayuntamientos de la Isla.
De las palabras de uno y otro se deduce que si existiera algún fallo de las administraciones en las inundaciones, sería atribuible, sin dudar, a la del Estado, ya que en el momento de acaecer las mismas el radar de la Agencia Española de Meteorología se encontraba averiado. Y nadie puede negar, que si el dichoso aparato hubiese informado del agua que iba a descargar sobre el Norte, se hubiera podido evacuar a muchas personas que vieron peligrar su vida, y muchos de los coches que fueron arrastrados por los aguas seguirían hoy prestando servicio a sus legítimos propietarios.
Sin embargo, en lo que a Los Realejos se refiere, se intuye - ¡menuda cartografía, ni un solo topónimo! - que no todo es tan sencillo. De los mapas del PDA parece deducirse que el Bco. Tornero, una de las ramas del de Palo Blanco, entraña riesgo para las calles Dr. González y Avenida de Canarias, pero no recoge, ni en sus datos ni en sus mapas - al menos yo no lo he encontrado - que este último suponga un evidente peligro para los vecinos de Los Barros o La Carrera, como demostraron los hechos. Por lo que, hubiese estado en servicio el radar o no, los efectos para ellos hubieran sido probablemente los mismos, y tendríamos que continuar hablando de inundaciones de viviendas y terrenos y de desbordamiento de barrancos.
Por otro lado, si tienen ustedes la curiosidad de acceder a la página web del Consejo Insular de Aguas de Tenerife, podrán comprobar que hoy, 28 de noviembre de 2009, sigue apareciendo el Plan de Defensa frente a Avenidas en su sección de Novedades(), '¡¡¡a pesar de haberse incluido en dicho sitio en agosto de 2005!!!. ¡No ha llovido nada después de eso! ¡Cuántas veces habrá actualizado la cartografía GRAFCAN desde esa fecha!
En fin, que ni el tiempo de tramitación, ni la actualización y precisión de la cartografía, ni el achacar a otros las responsabilidades propias, ni el considerar novedoso lo que quizás sea ya obsoleto, son muestras de diligencia y seriedad. Lo dicho: "quita pallá que me tiznas...". A los ciudadanos nos interesa, no tanto saber quién comete los errores - que también - sino que se sepan reconocer a tiempo, se corrijan cuanto antes, que las soluciones propuestas en el Plan sean las adecuadas y respondan a las necesidades reales, y que se lleven a la práctica en beneficio de todos.
